Por temas de seguridad, desde finales de febrero último, el exsecretario jurídico de la Presidencia Alexis Mera fue trasladado al Centro de Privación de la Libertad (CPL) de Tungurahua, en Ambato. El exfuncionario del gobierno de Rafael Correa cumple una pena de ocho años de cárcel por el delito de cohecho pasivo agravado, dentro de lo que se conoció como el caso Sobornos 2012-2016.
Mera, desde el 24 de septiembre pasado, se mantenía en el CPL de Cotopaxi, en Latacunga. Él fue uno de los pocos exfuncionarios del correísmo que cumplió la medida cautelar que se le impuso en el caso: arresto domiciliario y uso de grillete, lo que facilitó el cumplimiento de la orden de detención para que Mera cumpla la sentencia que un día antes, el 23 de septiembre último, había quedado en firme y se empezaba a ejecutar.
María del Mar Gallegos, parte de la defensa del exsecretario Mera, confirmó el traslado de su defendido a un “centro de rehabilitación para personas adultas”, que está cerca del Centro de Atención de Adolescentes Infractores (CAI), que es parte del mismo complejo penitenciario en Ambato.
La abogada aclaró que el cambio se dio por un tema de seguridad, mas no de salud. Según ella, la transferencia se dio por toda la conmoción que se registró en las cárceles del país en febrero pasado y en el que estuvo inmerso el CPL de Cotopaxi.
La conmoción a la que se refiere Gallegos es el amotinamiento simultáneo que se registró el 23 de febrero pasado en centros de rehabilitación de Guayaquil, Cotopaxi y Cuenca. Aproximadamente 81 muertos dejó la jornada violenta, generada por la rivalidad que mantienen bandas delictivas cuyos integrantes se encuentran repartidos en varios CPL del sistema penitenciario del país.
En el CPL de Cotopaxi se registró el menor número de muertos (8), pero mantuvo la misma lógica de violencia extrema usada para el cometimiento de asesinatos, incluso, hasta por descuartizamiento en algunos casos.
Para confirmar cuáles fueron las razones que generaron el traslado de Mera al CPL de Tungurahua y para conocer en qué zona de aseguramiento se lo ubicó exactamente, Diario EL UNIVERSO envió un pedido de información y entrevista al Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI), pero hasta el cierre de esta edición no existió respuesta alguna.
A poco de que fue ingresado a la cárcel en Cotopaxi, Mera solicitó el cambio al Centro de Rehabilitación Social (CRS) ubicado en Guayaquil. Pero casi de inmediato, a inicios de octubre pasado, él desistió de la solicitud explicando que lo hacía “por cuestiones de la coyuntura política que se suscita actualmente en el sistema penitenciario de la provincia del Guayas”.
Además de Mera, en el caso Sobornos 2012-2016 fueron sentenciados el expresidente Correa, el exvicepresidente Jorge Glas, como autores mediatos por instigación, los exministros María Duarte, Walter Solís y Vinicio Alvarado, los exasambleístas Viviana Bonilla y Christian Viteri, las exasistentes de Presidencia Pamela Martínez y Laura Terán y diez empresarios más.
Quien se mantiene aún en el CPL de Cotopaxi es Jorge Glas, que cumple tres sentencias por hechos de corrupción: dos sentencias en firme por delitos como asociación ilícita relacionada a la trama de Odebrecht y cohecho pasivo agravado; y una pena en primera instancia de ocho años de cárcel por el delito de peculado dentro del denominado Caso Singue.