Con buen ánimo y agradecido con las autoridades policiales de Ecuador se mostró Joel Oviedo, padre de las menores venezolanas que fueron reportadas como desaparecidas la semana pasada.
Ambas habían sido vistas por última vez en el sector de la Kennedy, cerca del colegio Don Bosco, en la capital, el 22 de abril último. Ante ello, familiares difundieron sus imágenes y se inició un operativo entre uniformados de Ecuador y Perú, e incluso se activó la alerta amarilla de la Interpol, para dar con el paradero de las infantes.
“Fueron al minimarket que está a tres cuadras de la casa, y desde ahí no supimos más nada. Eso fue el jueves a eso de las cuatro de la tarde. Desconocemos por qué la desaparición. No sabemos aún hasta yo tenerlas en mis brazos” dijo el padre de las niñas, Joel Oviedo, de nacionalidad venezolana, quien agregó desconocer cómo aparecieron en Perú.
El hombre negó haber tenido problemas dentro del hogar al aclarar que tienen una familia estable.
“Eso no fue motivo para que mis hijas desaparecieran. Hemos trabajado arduamente, día, noche, madrugada que me han apoyado (Policía Nacional) y les agradezco. No hemos dormido. Ahora estoy queriendo ingresar a territorio peruano, solicitar a las autoridades del Perú que me autoricen a ingresar, para saber en qué estado están mis niñas”, dijo Joel Oviedo, padre de las menores que esperaba noticias este mediodía en el puente internacional de Macará, en el límite fronterizo.
Aseguró ser comerciante, negociante de repuestos y con ello mantiene a su familia. Tanto Sofía, de 12 años, como Sara, de 13, estudian en colegios de la capital.
El ministro de Gobierno, Gabriel Martínez, dijo esta mañana que las infantes salieron por un paso irregular cubriendo la ruta Quito-Loja-Macará y que en las próximas horas viajaría a la zona limítrofe para entregar a las menores a su familia.