La madrugada de hoy, 15 de enero, se reanudaron las operaciones de extinción del incendio forestal registrado en el cerro Casitagua en Pomasqui, en el norte. El incendio, que comenzó a las 10:15 de ayer, consumió decenas de hectáreas de vegetación, según informó el Cuerpo de Bomberos.
Hoy se activó también el Comité de Operaciones de Emergencia, ubicado en el Colegio Nacional de Pomasqui, a fin de brindar la información que se requiera sobre el incidente.
El Cuerpo de Bomberos Quito trabaja en conjunto con las Fuerzas Armadas. Actualmente 200 bomberos y 40 militares participan en la extinción del incendio forestal. No se reportan personas o bienes afectados.
Por la condición agreste del terreno, la mayoría del combate contra las llamas ha sido manual, pero también participan helicópteros que tienen el sistema Bambi Bucket.
Ayer por la noche, desde el barrio Santa Clara de Asís, en las estribaciones del Casituagua, se pudo observar que las lenguas de fuego descendían a gran velocidad por la ladera, amenazando a unas viviendas que solo están separadas por una quebrada. A las 16:00, tres helicópteros sobrevolaban la zona afectada para apagar el infierno que se formó. “Cuando hay mucho calor, por aquí siempre se prende la vegetación. No hay árboles, pero sí mucho arbusto seco”, dijo un morador, quien estaba cerca de la Capilla y Mirador Rosa Mística, a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar.
Contaminación por incendio
La Secretaría de Ambiente recomienda limitar los tiempos de exposición al aire libre en los sectores de Carapungo, San Antonio de Pichincha y Pomasqui, además de proteger vías respiratorias, ojos y piel. Esto se debe a que los niveles de material particulado PM10 se encuentran elevados.
Las emisiones de compuestos orgánicos volátiles, sumadas a los altos niveles de radiación UV, podrían generar concentraciones de ozono troposférico en el ambiente. El ozono puede provocar tos, irritaciones en la faringe y ojos, así como garganta seca, especialmente en personas con asma, rinitis y enfermedades crónicas respiratorias. (I)
Fuente:www.lahora.com.ec