Leandro N. fue trasladado a una unidad judicial, luego de ser detenido en una de sus propiedades en Samborondón, en la provincia de Guayas. Foto: EL COMERCIO
Agentes de la Fiscalía y de la Policía siguen recorriendo Guayas, Manabí y Santa Elena. En esas tres provincias se sospecha que se levantó el emporio de Leandro N., principal financista y cabecilla de cuatro organizaciones delictivas que tienen vínculos con carteles mexicanos.
Los agentes que lo detuvieron, hace seis días, dicen que aún están contabilizando el dinero y las propiedades que tenía en territorio ecuatoriano. Las indagaciones son extensas, pues se conoce que utilizó 16 testaferros para lavar el dinero proveniente del narcotráfico.
Los reportes judiciales apuntan a que este hombre, que fue amigo cercano de José Luis Zambrano, alias ‘Rasquiña’, levantó un conjunto de empresas y negocios como fachada para mover todas las ganancias que tenía del narcotráfico. El listado de sus negocios es largo. Figuran empresas relacionadas con alimentos, agricultura, construcción, seguridad, transporte, agencias de publicidad, inmobiliarias, fábricas de madera, pesca y agropecuarias.
De hecho, los informes de la Policía señalan que este hombre en los últimos cuatro años movió al menos USD 16 millones. Parte de ese dinero es producto de los envíos de drogas desde los puertos de Guayaquil.
Además, cobraba ‘peajes’ a otras bandas para que puedan acceder a esas distintas terminales.
Leandro N. incluso, para evitar que la Policía rastreara su dinero, empezó a fundir lingotes de oro.
Esas piezas fueron confiscadas el día de su detención. Sin embargo, los agentes sospechan que el cabecilla tenía varias ‘caletas’ de dinero y de joyas. Esos motines aún están rastreándose en cada una de sus propiedades.