La Comisión Nacional de Sanidad de China informó que 60 de los nuevos contagios locales diagnosticados este lunes (59 confirmados y un asintomático), 32 se localizaron en Xiamen. Los análisis preliminares citados por la prensa local apuntaron a la presencia de la variante Delta.
Así, las autoridades chinas han decidido confinar desde este martes a los residentes Xiamen, ciudad de 5 millones de habitantes y una de las más pobladas de la provincia suroriental de Fujian, tras un rebrote de COVID-19.
Las autoridades temen que exista un rebrote a otras regiones del país asiático, pero que lograrán controlarlo antes del inicio de las vacaciones de la “semana dorada”, que comienza el próximo 1 de octubre. Las medidas son la suspensión de buses de larga distancia y el regreso a actividades virtuales.