Una operación valorada en casi USD 83.000 millones sacude los cimientos de Hollywood. Netflix logró imponer su oferta para la compra de Warner Bros. Discovery, desbancando a otros grandes postores. Esta adquisición no representa solo la suma de activos, sino una reconfiguración total del mapa audiovisual, con Netflix ascendiendo a la categoría de «super-estudio».
La compra otorga a Netflix la propiedad total de Warner Bros. Discovery, que incluye sus prestigiosos estudios de cine y televisión, y la joya de la corona: HBO y HBO Max.
Los ejecutivos de Netflix han explicado que, por el momento, no contemplan la fusión operativa de ambos servicios de streaming. Esto implica que HBO Max mantendrá su estructura corporativa separada.
¿Qué dice Netflix?
Netflix se ha comunicado con sus suscriptores y ha informado que no habrá fusiones con HBO porque la transacción para adquirir Warner tardará entre 12 y 15 meses.
Además, los planes de membresía de Netflix se mantienen iguales en sus valores. Asimismo, se aclara que no se podrá ingresara Netflix por la app de HBO y viceversa: ambas se mantienen independientes.
El valor para Netflix, por ahora, se centra en fórmulas colaborativas. Se espera la creación de paquetes o niveles de suscripción que permitan a los millones de clientes de Netflix acceder al contenido de HBO, aprovechando la «alta superposición» de suscriptores que ya existe entre ambas plataformas.
Con esta suma de clientes, Netflix se acerca a los 500 millones de suscriptores a nivel mundial, lo que aumenta enormemente su distancia frente a la competencia.
El cierre definitivo del acuerdo está supeditado a que la división de Global Networks de Warner Bros. Discovery (que incluye cadenas de televisión como CNN y TNT) se separe en una nueva empresa pública, lo que no ocurrirá hasta finales de 2026.