En los últimos días, se han registrado múltiples casos de agresiones contra políticos en Alemania, con cuatro incidentes en diferentes partidos políticos que solo se detuvieron con la intervención policial.
Este fenómeno, aunque en aumento, ha despertado una preocupación particular debido a la proximidad de las elecciones europeas. La politización de esta violencia, focalizándola en la extrema derecha, está generando debate en Bruselas.
El viernes pasado, Matthias Ecke, el principal candidato del Partido Socialdemócrata (SPD) en el estado federado de Sajonia para las elecciones europeas, fue gravemente herido mientras colocaba carteles electorales en Dresde.
Los presuntos agresores, vinculados a la ultraderecha, también habían atacado a otro político del Partido Verde momentos antes.
Tras el ataque a Ecke, la ministra del Interior, Nancy Faeser, organizó una reunión extraordinaria con los responsables de Interior de los länder y anunció un acuerdo para fortalecer el Código Penal y agilizar los procesos judiciales para castigar los actos de violencia contra figuras públicas.