Bulgaria y Rumanía, tras superar el último obstáculo del veto austriaco, planean la pronta eliminación de los controles terrestres en el espacio Schengen. La Unión Europea (UE) aprobó, de manera unánime, la entrada gradual de ambos países al área de libre circulación, marcando un «día histórico» tras el levantamiento del veto por parte de Austria
A partir del 31 de marzo, los controles en las fronteras aéreas y marítimas serán eliminados, con el compromiso adicional de acordar más tarde la fecha para el fin de los controles terrestres.
El presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, destacó que el objetivo prioritario es la plena aplicación de Schengen, incluida la eliminación de los controles terrestres. El Gobierno de Rumanía subrayó los beneficios del acuerdo para la ciudadanía, facilitando los viajes dentro de la UE y los estados asociados a Schengen.
A pesar de que la Comisión Europea y el Parlamento Europeo respaldan la entrada de Bulgaria y Rumanía desde 2007, Austria había bloqueado previamente su ingreso, temiendo un aumento de la inmigración. La ministra de Exteriores de Bulgaria, María Gabriel, expresó su esperanza de que en 2024 se confirme la abolición de los controles fronterizos terrestres.