La agremiación de restaurantes de Quito denuncia que un 60% de sus miembros recibió llamadas y mensajes de extorsión en los últimos meses.
“De mil dólares para arriba” sería la cifra que solicitan los presuntos extorsionadores a comerciantes, quienes aseguran que pese a denunciar los hechos el temor se ha apoderado de ellos.
Dueños de locales comerciales en el sur de la capital cuentan que existen casos que los negocios han tenido que cerrar por el miedo a ser víctimas de algún ataque.
Diego Vivero, presidente de Agrepi, hace un llamado a las autoridades de justicia a dar seguimiento a las denuncias para evitar el incremento de denuncias.
Víctor Herrera, comandante de Policía del DMQ, asegura que han identificado 30 puntos críticos en donde estarían operando estos delincuentes por medio de llamadas o mensajes.