El expresidente Abdalá Bucaram Ortiz y su hijo Jacobo son parte de la lista de siete personas que enfrentan una audiencia por delincuencia organizada.
Luego de no aceptar los vicios de nulidad planteados por los procesados por el delito de delincuencia organizada, entre ellos el expresidente Abdalá Bucaram Ortiz, su hijo Jacobo Bucaram Pulley y cinco personas más, la jueza penal de Pichincha Verónica Medina suspendió, la mañana de este martes, la audiencia de evaluación y preparatoria de juicio que se instaló poco después de las 09:00.
La audiencia contra los Bucaram, así como el exagente de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) de Quito Leandro B. y los ciudadanos Bryan P., Verónica A., Isabel M. y el israelí Sheinman Oren, se reinstalará el próximo sábado 12 de junio, a las 09:00, en una de las salas del Complejo Judicial Norte, en Quito.
Bajo el delito de delincuencia organizada la Fiscalía los investiga a todos por supuestamente haber planificado y ejecutado actividades delictivas, entre marzo y octubre de 2020, dentro de la comercialización de pruebas para detectar COVID-19 y mascarillas en medio de la emergencia sanitaria.
La audiencia arrancó sin la presencia física en la sala de los procesados, pero poco antes de las 11:00, en momentos en que la audiencia se había suspendido por 30 minutos para que la jueza Medina analizara los vicios de nulidad expuestos por las partes, a la sala de audiencias ingresó el exmandatario Abdalá Bucaram Ortiz.
En la reinstalación, Medina en su resolución oral dijo que no existe causal para declarar la nulidad de lo actuado y que tampoco procedería el pedido hecho para que se excuse de continuar conociendo el caso la jueza.
Inmediatamente y para procurar que la procesada Isabel M. tenga una defensa en igualdad de condiciones y no afectar ese derecho, la jueza Medina suspendió la diligencia, no sin antes pedir que la Defensoría Pública designe para la procesada un profesional que cuente con el tiempo y el conocimiento del caso.
La fiscal encargada del caso, Lidia Sarabia, se opuso a la suspensión de la audiencia, pues aclaró que no hay motivo para suspender la diligencia. Sarabia le recordó a la jueza que existen graves peligros de la caducidad de la prisión preventiva por este tipo de incidentes, los cuales no han permitido avanzar en legal y debida forma.
Tres veces anteriores esta audiencia fue diferida debido a la interposición de recursos por parte de los procesados. El último diferimiento se dio a finales de mayo, pues las defensas de Bucaram Ortiz y Bucaram Pulley recusaron a la jueza que estaba en ese momento con el caso, María Elena Lara.
Cristian Romero, abogado de Jacobo Bucaram Pulley, solicitó verbalmente que se cambie de día para continuar con la audiencia de evaluación y preparatoria de juicio, debido a que el sábado 12 de junio tenía en agenda cuestiones académicas previamente establecidas. Según Romero, por el principio de continuidad, él se ha presentado en esta audiencia y debería continuar hasta el final, cosa que no podría suceder por el tema académico que plantea y eso afectaría el derecho a la defensa de su cliente.
Medina le recordó a Romero que en el expediente constan otros profesionales del derecho como abogados de Bucaram Pulley. Aun así la jueza dijo que existirán todas las facilidades para que se dé una correcta defensa para todos los procesados y solicitó a la Defensoría Pública que defina para este proceso no solo uno, sino varios defensores públicos que tengan tempo y conocimiento del caso que se continuará el próximo sábado.
